Fernando Furioso
Autor: Hiawyn Oram
Ilustrador: Satoshi Kitamura
Editorial: Ekaré
De 7 a 107 años
Pier, de 10 años, se metió, sin darse cuenta, en la casa de Fernando Furioso, o lo que es lo mismo, en el libro que se titula así.
Nada más entrar se quedó perplejo, esto es, confuso ante lo que debía hacer o pensar.
Al traspasar la puerta, oyó a Fernando decirle a su madre que esa noche quería quedarse a ver una película en la televisión.
Pier pensó que eso es de lo más normal, pues a él también suele apetecerle más quedarse a ver la tele que ir a la cama.
La respuesta que recibió Fernando, también la ha oído Pier muchas veces.
–No, es muy tarde. Vete a la cama.
–Me pondré furioso –dijo Fernando.
Y dicho y hecho. Se puso tan furioso como un viento huracanado que destrozara todo a su paso. Su cólera fue peor que la del más terrible de los terremotos.
De nada sirvió que su madre, su padre, su abuela y su abuelo le dijeran: «¡Ya basta!».
Pues no bastó. La habitación, la casa, la ciudad, el mundo entero se deshicieron en migajas ante la imparable furia de Fernando.
Pier, asombrado, acompañó a ese Fernando furibundo a través de las páginas del libro, a través de la ciudad destruida, a través del espacio. Y se sintió más confuso que cuando se metió en su casa.
«¿Me habré comportado yo alguna vez como Fernando?», pensó Pier poniéndose un poco colorado.
Al terminar la lectura, cerró el libro con cuidado, con mucho cuidado, procurando que no se escapara ni una gota de la ira que había contenida en él.
Texto y fotos: Paco Abril