sábado, 2 de octubre de 2010

Alexander Calder


Título: ¡Mira qué artista! Alexander Calder
Autora y diseñadora: Patricia Geis
Editorial: Combel
De 6 a 106 años

En el colegio Los Campones, de El Berrón (Siero), María Luisa, una de sus creativas maestras, ha propuesto a sus alumnos que interpreten en clase a un hombre o una mujer que haya realizado alguna labor destacada a lo largo de la historia de la humanidad. Para ello, cada uno elegirá libremente un personaje. El día que les toque representarlo, tendrán que contar muy brevemente quién es. Después, sus compañeros le harán preguntas que el actor deberá responder como si fuera ese importante personaje. Cada uno tendrá que investigar en la biblioteca escolar sobre la relevante personalidad que haya escogido.
Esta interesantísima idea ha propiciado que por el colegio hayan pasado ya Frida Kahlo, Charles Darwin, Marie Curie o Leonardo da Vinci, entre otros muchos.
Cuando le tocó el turno a Abel Canteli, de 10 años, se dirigió a sus compañeros de clase diciendo:
–Hola, me llamo Alexander Calder y soy un artista, pero podéis llamarme Sandy, como hacen mis familiares y amigos.
Esta sencilla presentación fue suficiente para que toda la clase se convirtiera en una sala de prensa preparada para entrevistar a un gran artista. Las manos de los periodistas no dejaban de levantarse. Las preguntas se sucedieron una tras otra.
–¿Dónde y cuándo naciste?
–Vine al mundo en Filadelfia (Estados Unidos) en 1898.
–¿Por qué eres conocido?
–Porque soy un artista capaz de hacer una obra maestra con cualquier cosa, hasta con lo que se tira a la basura.
–Te animaron en casa a ser artista o tus padres hubieran preferido que te dedicaras a otra cosa.
–En mi casa me tiraron de cabeza al arte, ya que mi padre y mi abuelo eran escultores y mi madre pintora, así que todos satisfechos con mi dedicación.
–¿Cuáles son tus obras más famosas?
–Parece ser que mis móviles
–¿Qué son?
–Esculturas que se mueven.
–Como artista, ¿tienes algún color preferido?
–Ya lo creo. Mi color más querido es el rojo. Tengo varias esculturas, no móviles, sino quietas, estables, pintadas de rojo.
–¿Cómo podemos nosotros conocer algo más de tu vida y de tu obra?
–Muy fácil. Leyendo y mirando el estupendo libro ¡Mira qué artista! Alexander Calder, este que tengo en las manos. Creo que es uno de los mejores que se han hecho para que los niños me conozcan. Es fantástico. Me hubiera gustado publicarlo a mí. Os invito a que lo abráis y realicéis un retrato de perfil con la cadena que aparece en una de sus páginas. El libro está pensado para que todos sean capaces de crear igual que yo.